Acelera el paso,
corre que te adelantan.
Llegarás el último
con diez minutos de antelación.
Coge, si los tuviste,
los colores,
las ilusiones,
los sueños:
véndelos.
Tendrás metros cuadrados,
cheques nominativos,
y corbatas de seda.
Serás patético
darás pena
tendrás miedo
perderás la sonrisa
…
Al poco tiempo,
en tu pechera,
en tu reputación
y en tu vida,
descubrirás
una mancha amarilla.